lunes, 14 de diciembre de 2009

Lo lindo que fue dejar mi "comer por comer" para darle mi paquete de oreos a dos hermanitos que de seguro fue lo primero que comian en todo el dia aunque haya sido casi de noche... Lo feliz que me sentí cuando les dije que me acompañen y les compré un baggio... se lo tomaban rapidisimo me miraban sonreian y se miraban, estabamos los tres sentados en el cordón de la calle de uriarte y agrelo... la gente pasaba y miraba; pero, realmente; a nosotros tres nos importaba? NO! ni teniamos tiempo de fijarnos en eso... el paquete se acabó y de mi bolso saqué mi alfajor preferido que lo guardaba para la noche.. Sí, definitivamente fue mejor invertido.. cuando se fueron largaron una sonrisa llena de migas y dijeron: gracias, y yo los miraba y solo pude decirles: de nada...
cuando cruzaba el boulevard para volver a mi casa, ya casi oscurecía me dí cuenta que esto no iba a solucionar nada, pero en ese momento necesitaba sentirme útil. Por qué? porque yo puedo darle una MISERA PARTE DE MÍ, y gente que tiene millones de cosas más que yo no le dan lo que les corresponde?

2 comentarios:

  1. qué lindo lau qué lindo lau qué lindo
    se me llena el pecho de emoción y me dan ganas de llorar

    ResponderEliminar
  2. Exacto......es imposible cambiar al mundo....pero que gratificante es poder aportar con poco,casi nada para ser la heroina de alguien......Seguro ellos te recordaran como "el angel de las galletas oreo"...

    Un fuerte abrazo para ti...

    Salud!!

    ResponderEliminar

redondito de ricota